El concejal de Bienestar Social del Ayuntamiento de Ponferrada, Pedro Muñoz, celebró ayer el Día Mundial de la Concienciación del Autismo en la sede de la Asociación Autismo Bierzo, ubicada en el local número 17 de los bajos del estadio del Toralín, de Ponferrada.

En dicha sede, el equipo directivo de Autismo Bierzo, formado por el presidente, Iván rivera Soria; la vicepresidenta, Pilar Barredo, y por las piscólogas Sandra Coruña y Rosa Ana Fontaine, hizo entrega al concejal ponferradino del manifiesto elaborado por el movimiento asociativo del Autismo en España de cara a las Elecciones Europeas, Generales, Autonómicas y Municipales de 2019.

Dicho manifiesto es un llamamiento a los futuros miembros de las instituciones y administraciones públicas para que manifiesten su apoyo al avance de los derechos del colectivo en toda Europa de cara a los próximos mandatos. A Se estima que hay 5 millones de personas con trastorno del espectro del autismo (TEA) en la Unión Europea, más de 450.000 de ellas en España, conformando un colectivo de alrededor de 1, 5 millones de personas considerando el impacto directo sus familias.

De lo que se trata es de ir derribando barreras en cuanto a la discriminación y a favor de una correcta integración de las personas con autismo en la sociedad.

Específicamente el manifiesto pide a los partidos políticos en España, que de cara a las próximas elecciones que se comprometan a aprobar el Plan de Acción de la Estrategia Española de Trastorno del Espectro del Autismo; poner en marcha un órgano específico de investigación y formación en TEA; elaborar una Estrategia que garantice la detección precoz en las personas con discapacidad en general, y de manera específica en las personas con TEA; garantizar el acceso a una atención temprana desde el nacimiento hasta los seis años de edad de todo niño o niña con TEA; garantizar una red variada, suficiente y especializada de servicios, recursos y centros educativos en todos los territorios; poner en marcha medidas que favorezcan el acceso de la persona con TEA al empleo y a la vida independiente; implementar apoyos adecuados y específicos para las personas con TEA en proceso de envejecimiento y medidas que favorezcan la permanencia de la persona con TEA en su entorno de residencia después de los 65 años; tener en cuenta las especificidades de las personas con TEA a la hora de aplicar la variable de discapacidad en la normativa aprobada, conforme a los criterios diagnósticos vigentes (DSM 5 y CIE 11); asegurar la atención integral y específica a la salud de las personas que forman parte de este colectivo, a través de la creación de Unidades especializadas de atención y protocolos específicos de intervención, que contemple la coordinación de los equipos multidisciplinares; promover la accesibilidad universal de la información, contextos, bienes y servicios, considerando especialmente medidas y recursos de accesibilidad cognitiva, tales como lectura fácil, apoyos visuales, sistemas pictográficos o diseño de entornos; facilitar apoyos y ayudas especializados a las familias de las personas con TEA, de manera que disfruten de una calidad de vida satisfactoria a través del desarrollo de programas integrales y especializados de apoyo; e impulsar la formación de los profesionales vinculados a sectores clave para las personas con TEA y sus familias, tales como la educación, sanidad, servicios sociales, justicia o seguridad.