Minuto de silencio contra la violencia machista ante las puertas del Consejo Comarcal del Bierzo. Foto: Raúl C.
Hoy mismo se ha confirmado de la muerte de una mujer más a manos de de su pareja, ya son 45, ha comentado el presidente del Consejo Comarcal del Bierzo´, Gerardo Álvarez Coutel, en el minuto de silencio que se ha guardado en memoria de todas la mujeres asesinadas este año.
‘Nos gustaría que no hubiera más víctimas y que las administraciones competentes buscaran las soluciones necesarias para que esto no vuelva a ocurrir, para que no tengamos que volver a manifestarnos un 25 de noviembre’, ha añadido el Presidente.
Antes del minuto de silencio la consejera de Formación y Empleo, Alciia García Tejón, ha leído un manifiesto en el que se ha pedido a la sociedad que tome conciencia de la gravedad del problema, definiéndolo como terrorismo machista, un machismo que forma parte de la vida diaria, en el trabajo, en las familias y en los colegios, ha recordado García.
«Pero cuando nos reímos ante comentarios de tipo sexual hacia una mujer en un contexto fuera de lugar y les llamamos piropos; cuando aceptamos que sobre la mujer debe caer la máxima responsabilidad del cuidado del hogar y de la familia; cuando aceptamos el sexismo en la educación, en el trabajo, en los medios de comunicación; cuando toleramos la desigualdad en las empresas y en los salarios; cuando, por hacer o no hacer, seguimos manteniendo ese techo de cristal insalvable para muchas mujeres», remarca el manifiesto.
En el texto se pedía también reflexión sobre la forma de hablar y actuar que tenemos para ir, poco a poco, eliminando «esa estructura mental invadida por el machismo cotidiano» y recuerdo para todas la víctimas, mujeres e hijos asesinados.
El manifiesto terminó con el recuerdo de Jessica Bravo, asesinada el pasado 9 de noviembre ante su hijo y otros niños, ¿Qué más pudo hacer Jessica para salvarse? En este caso, y en otros muchos, fracasa la sociedad, la política, la policía, la justicia… También es el fracaso de quienes hablan continuamente de denuncias falsas, de quienes les ríen las gracias a los machistas o justifican las agresiones culpando a las mujeres por su manera de vestir o de ser, o porque iban solas por la calle…