Los 40 alumnos de la escuela de danza Coppelia de Ponferrada que participaron, junto al Ballet Ruso Imperial, en el Cascanueces cumplieron con el reto que se plantearon desde el pasado mes de diciembre. La función en el Teatro Bergidum logró un lleno absoluto.
Su intervención fue en varias escenas de los dos actos en que se divide la obra, haciendo de soldados, ángeles y enanitos.
En la puesta en escena del Cascanueces participan más de 40 bailarines del Ballet, muchos de ellos galardonados en prestigiosos concursos. El Ballet Ruso fue creado en 1994 por iniciativa de la gran Maya Plisetskaya y del director artístico G. Tarandá, quien fue además solista principal del Ballet Bolshoi de Moscú.
La compañía ha recorrido países como Finlandia, Francia, Alemania, Japón, Israel, Sudráfica, Brasil, China, Austria y Nueva Zelanda con un repertorio que incluye los clásicos más destacados de la danza clásica: El lago de los cisnes, La Bella Durmiente, Giselle, Don Quijote, etc.
