Stop Desahucios Bierzo, Laciana y La Cabrera convoca nuevas movilizaciones en Ponferrada y en Bembibre para esta semana. Concretamente las protestas tendrán lugar el miércoles, día 21, ante la oficina del Banco Popular en Ponferrada, ubicada en la Avenida de España, nº 13 de Ponferrada y el viernes, día 23 de agosto, en Bembibre ante las puertas de la entidad La Caixa, en la Avenida Villafranca, nº 17.
El colectivo ha decidido volver a llevar sus protestas a la calle después de la celebración de la asamblea semanal que tuvo lugar el pasado lunes en la sede del Consejo Local de la Juventud de Ponferrada. Las concentraciones tienen como objetivo denunciar la falta de respuesta de las entidades bancarias a los problemas de las familiar afectadas por la hipoteca así como rechazar las amenazas y la manipulación que ejercen los bancos.
El miércoles, día 21, a las 12:00 tendrá lugar una concentración a las puertas de la oficina del Banco Popular de Ponferrada, en la Avenida de España, nº 13. El objetivo de esta protesta es denunciar, una vez más, la hipocresía y manipulación de esta entidad que sigue sin dar respuesta a tres familias bercianas que han solicitado una carencia en su hipoteca. Además con esta protesta el colectivo Stop Desahucios quiere denunciar que tras un mes de negociaciones con una familia que ha pedido una dación en pago con alquiler social la entidad dice que sólo concede la dación de una parte de la deuda del contrato hipotecario. Por todo ello el grupo Antidesahucios exige a esta entidad la agilidad de la tramitación de estos cuatro casos ya que la dilatación en el tiempo en la resolución puede conllevar a procedimientos judiciales que acarreen aún más consecuencias negativas para estas familias.
El viernes, día 23 de agosto, el colectivo traslada sus protestas a Bembibre. En esta ocasión la concentración será a las 12:00 ante las puertas de La Caixa, en la Avenida Villafranca, nº 17. Con esta acción STOP Desahucios pretende apoyar a una familia que espera desde hace un mes para que la entidad le conceda una carencia en su hipoteca. Los afectados no reciben respuesta pero si sufren el acoso del director de la entidad que a deshoras y un día tras otro les llama a su casa para forzarles a firmar una documentación con la que aceptarían la herencia del padre, asumiendo de este modo la deuda hipotecaria del fallecido. La deuda de esta familia crece día a día mientras La Caixa da la callada por respuesta y sigue presionando a la familia.
