El Quinteto Bergidum Flavium y el Trío Arousal, formaciones integradas por cuerda y piano, cerrarán el festival Corteza de encina el 18 y 19 de agosto, respectivamente, con sendos conciertos en la Bodega de la zona palacial del Castillo de los Templarios. Las localidades, al precio de 5 euros, ya están a la venta en la taquilla del Castillo

El quinteto “Bergidum Flavium” nace por el impulso del profesor del Conservatorio Cristóbal Halffter Daniel Bombín, que ofrece a los estudiantes la posibilidad de participar en una agrupación poco usual como es un quinteto formado por violín, viola, violonchelo, contrabajo y piano.

El grupo está integrado por Manuel Pérez Morodo (violín), que actualmente continúa sus estudios en el Centro Superior “Katarina Gurska” de Madrid; Jesús Falagán Álvarez (viola), integrante de la Joven Orquesta Sinfónica de Galicia; Claudia Barrio Fernández (violonchelo) que es estos momentos cursa estudios superiores en el Centro Superior Katarina Gurska en Madrid; Javier Clemén Martínez (contrabajo) que continúa sus estudios en la Escuela Universitaria CODARTS de Rótterdam y es miembro de la Joven Orquesta de Utretch y la Joven Orquesta Nacional de los Países Bajos; y Hugo Prada Fernández (piano) que continúa ahora su formación en el Centro Superior de Música de Galicia.

El programa incluye el “Quinteto para piano D. 667 en La mayor La Trucha”, de Franz Schubert y el “Cuarteto para Contrabajo n° 4 en Re Mayor”, de Franz Anton Hoffmeister.

El Trío Arousal, por su parte, surge en el Conservatorio Superior de Castilla y León bajo la tutela del maestro Alberto Rosado Carabias. Aunque de reciente creación, cuenta en su trayectoria con la participación en el ciclo de conciertos del Taller de Música Contemporánea organizado en el Teatro Liceo de Salamanca, con músicos de renombre como Jose Luis Temes, entre otros.

Está integrado por el violinista jienense Alberto Higueras Rodríguez y la pianista Claudia García Herreras, además del chelista ponferradino Daniel Iglesias Silva, que ha formado parte de agrupaciones como la Banda de Música Ciudad de Ponferrada, la Orquesta Sinfónica Cristóbal Halffter, el Ensemble Joven del Bierzo, el Quinteto Excéntrico, la Asociación VallSal o el Dúo Ronam. Todos ellos realizan actualmente sus estudios superiores de piano en el Conservatorio Superior de Música de Castilla y León en Salamanca. Interpretarán obras de Ludwig van Beethoven y Clara Schumann.

El sábado 13 de agosto, el pianista y director de orquesta, Pedro Halffter, homenajeó en el ciclo de Música en Villafranca a su madre y también pianista villfranquina, Marita Caro, con motivo del quinto aniversario de su fallecimiento.

Halffter interpretó ‘Las variaciones Goldberg’ de Johann Sebastian Bach. Una obra que emotivamente recordó estudiaba junto con su madre y cuya partitura se encontró abierta en el piano de Marita tras su deceso, como si de un encargo se tratara para que Pedro continuará estudiándola y tocándola.

«Las variaciones Goldberg constituye en sí un evento que ningún melómano se puede perder por su importancia en la historia del clasicismo musical, por la belleza que el propio Bach impuso a esta creación y por su dificultad, que hace que sólo sea accesible a los grandes virtuosos del instrumento, puesto que muy pocos pianistas se han atrevido con ella», comentó el propio Halffter.

Marita Caro

La carrera musical de Marita Caro despegó en los años cincuenta cuando recibió el Premio Extraordinario del Conservatorio de Madrid y poco después el Ricardo Viñes. Fue la primera mujer que actuó como solista de piano con la Orquesta Nacional. Su audacia y valentía le hizo que más allá de quedarse estancada en el clasicismo o el romanticismo tradicional de la época, abordase a sus contemporáneos del Siglo XX, entre los que se encontraban no sólo la obra de
su marido, Cristóbal Halffter, sino también la de los grandes rompedores del panorama internacional: de Pierre Boulez a Ligeti o del español en el exilio Roberto Gerhard, a la escuela de Viena, con preferencia por Anton Webern.

Acompañada por el pianista, Eduardo Frías, la soprano Vanessa Goikoetxea participó ayer en el ciclo Música en Villafranca con un repertorio de arias de ópera, con títulos tan representativos como Rosario (de Goyescas), Iolanda y Tatiana (escena de la carta, ambas de Tchaikovsky), Suor Angélica y Tosca” (Puccini), y Marietta`s song (Korngol).

Por su parte, Eduardo Frías interpretó obras de Brahms, Chopin, Bortkiewicz, y Mascagni.

Hoy el Música en Villafranca acoge un clásico en su programación y una de sus citas más importantes y esperadas con la interpretación de “Las variaciones Goldberg”, de Johann Sebastian Bach, a cargo de Pedro Halffter, concierto homenaje a su madre, la gran pianista villafranquina Marita Caro, alma mater del Festival y a quien se le rendirá un emotivo homenaje antes del comienzo.

El domingo 14, el festival culminará con un recital de la soprano Vanessa Goikoetxea, dedicado a la zarzuela, cuenta con títulos como «Tango de la Menegilda”, “Chateau Margaux”, “¡Ay ba!” (de la Corte del Faraón), “A mi novio yo le quiero” y “Tres horas antes del día”.