Alumnos de la Escuela Taller Pablo Voces, dependiente de la concejalía dirigida por David Pacios y dentro del PMFE Ponsferrata, concluyeron la rehabilitación del puente de la Plaza Lope García de Castro en Villanueva de Valdueza que se encontraba muy deteriorado y con grandes baches que dificultaban el tránsito por el mismo .

Para su rehabilitación los alumnos-trabajadores han tenido que limpiar y regularizar el pavimento existente para posteriormente ejecutar una losa de hormigón armado de 15 cm de espesor al que se le dio un acabado de hormigón impreso en color gris que se integra perfectamente con la urbanización ya existente, se colocó a la vez una canaleta de hormigón con rejilla para la recogida de las aguas y evitar el embalsamiento de la misma.

Igualmente y como complemento a la formación teórico-práctica y dentro del módulo de sensibilización medioambiental, los alumnos del PMFE Ponsferrata que cursan el certificado de profesionalidad de “Pavimentos y albañilería de urbanización” durante 9 meses junto con sus compañeros del PMFE Matinot VI de la especialidad de soldadura han visitado recientemente las instalaciones de la Planta de Biomasa de Cubillos del Sil

La Junta convoca más de 11 millones para la mejora de los servicios públicos que prestan las mancomunidades, un 2,4 % más que la destinada a este mismo objetivo en 2023

El Boletín Oficial de Castilla y León recoge hoy la Orden de la Consejería de la Presidencia por la que se convocan las ayudas a mancomunidades y otras entidades locales asociativas, con cargo a la Cooperación Económica Local General de 2024. Esta convocatoria estará abierta hasta el 17 de mayo.

Las mancomunidades son entidades locales configuradas por la asociación voluntaria de municipios. Existen para prestar diferentes servicios públicos a todos los núcleos de población que la conforman. Algunos de estos servicios son, por ejemplo, la recogida de residuos, el mantenimiento de las redes de agua y saneamiento, la iluminación de las calles, o la limpieza de caminos y montes.

En Castilla y León existen, actualmente, 240 mancomunidades tradicionales. Además, existen otras 38 comunidades de villa y tierra, o asocios, y una comarca, que prestan funciones similares a sus municipios. Estas entidades engloban a 2.037 municipios, lo cual significa que, en total, más del 90 % de los municipios de Castilla y León está mancomunado para la prestación de algunos servicios públicos locales, tanto en municipios del medio rural como del ámbito urbano y periurbano. En estas mancomunidades residen en torno a 1.700.000 personas. 

La aportación total que hará la Junta de Castilla y León, a través de la Consejería de la Presidencia, para esta línea de ayudas será de 11.630.000 euros, lo cual representa un 2,4 % más que la realizada en 2023, consolidando el incremento del 90 % que experimentaron estas ayudas el año pasado respecto a 2022.

De este presupuesto, algo más de 9.920.000 euros irán destinados a inversiones en mancomunidades y entidades asociativas tradicionales, mientras que 1.575.000 euros se destinarán a las Mancomunidades de Interés General (MIG) que se han conformado en los entornos de las principales ciudades de Castilla y León, y 133.510 euros serán asignados a la Comarca de El Bierzo, por tener reconocido un tratamiento similar al previsto para las MIG en las ayudas de la Junta de Castilla y León.

La aportación que hace la Consejería de la Presidencia deberá también ir acompañada de la colaboración económica de las propias mancomunidades, de tal forma que esta Consejería aportará un 75% de los fondos, mientras que las mancomunidades se harán cargo del 25% restante.

Esta fórmula de colaboración administrativa permite a las entidades locales incrementar el rendimiento de sus fondos propios, y supone que el importe total de recursos económicos movilizados gracias a estas ayudas de la Junta de Castilla y León pueda ascender a más de 15.500.000 euros.

Novedades en la convocatoria

Estas subvenciones, dedicadas a la modernización y mejora de los servicios públicos municipales que se prestan de forma mancomunada, inciden además en la consolidación económica, el fomento del empleo y el cuidado del medio ambiente.

En concreto, son siete los objetos a los que se dirigen estas subvenciones. Cinco de ellos se han mantenido respecto a la convocatoria de esta subvención en el año 2023: camiones de recogida de residuos sólidos urbanos (RSU), camiones de limpieza y mantenimiento del servicio de saneamiento de aguas residuales, otros vehículos al servicio de las mancomunidades, contenedores para recogida de residuos sólidos, e inmuebles. A estos elementos hay que añadir otros dos introducidos en esta convocatoria: retroexcavadoras y camiones barredora.

Gracias a las retroexcavadoras financiadas por esta línea de ayudas, las mancomunidades podrán acondicionar sus terrenos para construir los cimientos de nuevas instalaciones, o para conducir cables de electricidad o tuberías a través del subsuelo. Por su parte, los camiones barredora ayudarán a la limpieza viaria de los diferentes municipios, pudiendo desplazarse fácilmente por sí mismos entre ellos.

Asimismo, hay que destacar que, en las subvenciones de este ejercicio, se elimina como requisito necesario la sustitución del vehículo o equipamiento que vengan prestando el servicio. Además, también podrán ser beneficiarias de una subvención aquellas mancomunidades que tengan otro camión RSU, salvo que lo hubieran recibido en la convocatoria del año pasado.

Todas las inversiones que se financien gracias a esta línea de ayudas deberán justificar su carácter sostenible y su implicación con el cuidado del medio ambiente. Esto significa, por ejemplo, que, en el caso de la adquisición de nuevos vehículos, se deberá acreditar que estos vehículos respeten las normas europeas en materia de emisiones contaminantes. También implica que, en el caso de la construcción de nuevos inmuebles o su modificación, estos deben mejorar su eficiencia energética.

El plazo para que las mancomunidades soliciten esta ayuda de la Junta de Castilla y León termina el 17 de mayo. En la Orden de la convocatoria podrá consultarse cuál es el procedimiento para solicitar estas ayudas a través de la web de la Junta ( https://servicios.jcyl.es/wcoe  ), en un entorno web más sencillo y ágil, así como toda la documentación a presentar y los requisitos para su concesión.

En las áreas de Soria, El Bierzo, Aranda de Duero, Miranda de Ebro y Medina del Campo más de la mitad de las plazas han quedado vacías; y en Burgos y Zamora el 36%

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) urge al Ministerio de Sanidad y a la Junta de Castilla y León medidas para incentivar la cobertura de médicos de familia. Además, demanda una reflexión y análisis sobre la formación y la situación laboral de esos especialistas sanitarios.

La exigencia de CSIF llega tras conocerse que la repesca del MIR (Médico Interno Residente) ha dejado sin cubrir 47 plazas de Medicina Familiar en Castilla y León, la cuarta parte (24,7%) del total asignado en la Comunidad y el 19% de las plazas desiertas que han quedado en España (246).

Las vacantes sin cubrir en Castilla y León se concentran en las provincias de Burgos con 21 plazas, 4 en el área de Burgos, 11 en la de Aranda de Duero y 6 en la de Miranda de Ebro; Soria (11); León (7), una en León y 6 en Ponferrada; Zamora (5); y Valladolid, con 3 plazas en Medina del Campo.

En la provincia de Soria se han quedado sin cubrir el 73% de las plazas, 11 de 15; en las áreas de Salud del Bierzo y de Aranda de Duero el 67%, 6 de 9; en Miranda de Ebro el 52%, 11 de 21 plazas; en Medina del Campo el 50%, 3 de 6; y en el área de Burgos y de Zamora el 36%, 4 de 11 y 5 de 14, respectivamente.

CSIF vuelve a alertar “de la falta de interés que muestran los nuevos médicos por trabajar en la Atención Primaria de Castilla y León, al no encontrar alicientes suficientes”. A la dispersión geográfica de la Comunidad y los hándicaps de trabajar en un entorno rural más aislado, se suman las precarias y desmotivadoras condiciones laborales, el exceso de carga de trabajo asistencias y burocrática, la falta de incentivos por ocupar puestos de difícil cobertura, o los menores salarios que se ofrecen en otras comunidades vecinas.

Así lo recuerda el responsable del sector de Sanidad de CSIF Castilla y León, Enrique Vega, que también apunta otros motivos de ámbito general, como la falta de reconocimiento de la especialidad de Medicina Familiar y Comunitaria, o las limitaciones que aportan los centros de salud a jóvenes que acaban de salir de la universidad para su proyección profesional o, por ejemplo, en el ámbito de la investigación.

CSIF pide también que se acabe con la adjudicación de plazas por el sistema telemático y se vuelva al presencial en tiempo real; reclama mayores incentivos económicos para plazas de difícil cobertura (alejados de centros hospitalarios y con exceso de guardias); y exige la convocatoria de la Mesa de Negociación del Ámbito para analizar la formación sanitaria especializada, especialmente la de Medicina Familiar.